La ciudad maya de Chichén Itzá esta ubicada en el norte de la Península de Yucatán, muy cerca de la ciudad colonial de Valladolid. Es uno de los sitios arqueológicos más tardíos de la civilización maya y se desarrolló en distintas etapas, de las cuales aun quedan monumentales edificios. La zona muestra evidencias de influencia tolteca, tanto en la arquitectura como en el arte . Se considera que Chichén Itzá floreció en dos diferentes etapas, la primera entre el 600-900 d. c. cuando se construyeron edificios del estilo Puuc, y la segunda a la llegada de los petenes, quienes emigraron de Campeche en el siglo X.
El primero en dejar constancia de las impresionantes ruinas de Chichén Itzá fue fray Diego de Landa, que describió, en 1566, los extraordinarios edificios que habían escondidos en la selva tras varios siglos de abandono, el Templo de los Guerreros, el Castillo, el grupo de las mil columnas entre otras, también algunas de las anécdotas que contaban los mayas actuales sobre sus antepasados.
Las plataformas construidas de Chichén Itzá, ocupan una amplia superficie y presentan varios estilos arquitectónicos que corresponden con las diferentes etapas de su evolución. Puede distinguirse entre el llamado Chichén Viejo, con construcciones del estilo Puuc, y el Chichén Nuevo, que data de principios del siglo X, cuando, según recoge la tradición maya, llegaron grupos procedentes del centro de México llamados toltecas que adornaban a Quetzalcóatl o Kukulcán nombre dado por los mayas, dios representado como una serpiente emplumada.